Este viernes 29 de noviembre tuvo lugar en el INVASSAT la jornada técnica organizada por UGT PV y el propio INVASSAT: “Enfoque integral en la gestión de los factores psicosociales, desde la perspectiva de género”
La jornada contó con el aforo completo de asistentes, lo que demuestra el interés de las personas delegadas de prevención y personas técnicas en la prevención de riesgos psicosociales en estas cuestiones.
La presentación de la jornada corrió a cargo del subdirector del Invassat, Fernando Sáez, que destacó la diferencia existente entre las condiciones de trabajo entre hombres y mujeres y entre las propias consecuencias para la salud también. En ese sentido Sáez destacó que la perspectiva de género se debe transversalizar en la prevención de riesgos laborales y no solo reducirla a cuestiones de maternidad.
Por su parte Marisa Baena, secretaria de salud laboral de la UGT-PV; destacó el alto coste de la no intervención en prevención de los riesgos psicosociales, y el empeño de la UGT por abordar este tipo de riesgos desde hace años, desde la creación del observatorio de riesgos psicosociales. En esa línea y en el marco de las acciones de la Estrategia Valenciana de Seguridad, Salud y bienestar laboral se ha llevado a cabo un estudio con la Universidad JAUME I, del que se presentan sus resultados.
La jornada técnica fue moderada por Balbino Cortés, presidente de ERGO CV, que en primer lugar dio la palabra a José Luis Llorca Rubio, Jefe de Servicio Centro Territorial INVASSAT de Valencia y Vocal de ERGO-CV; yque presentó los principales resultados del estudio de los riesgos psicosociales, sus consecuencias y las medidas de prevención en el sector público. Todo ello derivado de las competencias del INVASSAT como servicio de prevención propio, para los sectores de justicia, educación y administración pública del Consell de la GVA, con la aplicación del método UNIPSICO.
Llorca señaló además que nos encontramos con sectores altamente feminizados y con una elevada media de edad y entre los principales resultados, destaó la necesidad de apoyo social de la organización sobre las trabajadoras y trabajadores, así como la retroinformación positiva y formación en liderazgo, actuando sobre la organización del trabajo.
A continuación, Diego Climent Gas, de la universidad Jaume I, presentó los principales resultados del análisis llevado a cabo en la Comunidad Valenciana, planteando en primer lugar que prevalece una motivación en las empresas a abordar este tipo de riesgos por una exigencia normativa, ya que cuando se actúa se hace preferentemente en temas relacionados con conciliación laboral, la violencia y acoso en el trabajo, pero que en general, no se traduce en la reducción de daños ni de riesgos debido a la falta de actuaciones en muchas ocasiones por la naturaleza compleja de los factores de riesgo. Destacó asimismo como principales riesgos el estrés laboral, y concluyó afirmando que la desigualdad ocupacional hace necesario el enfoque de género.
A continuación, el director del proyecto, Miguel Ángel Gimeno planteó el procedimiento para actuar sobre los factores de riesgos psicosociales, con la necesidad de amplificar nuestra perspectiva preventiva hacia la pedagogía y cultura preventiva, avanzando hacia una visión sistémica a largo plazo, no solo para prevenir el riesgo sino para promocionar la salud. En esa línea hizo mención a la necesidad de la elaboración de planes preventivos multinivel basados en la participación y el dialogo, trabajando con un procedimiento integral de intervención psicosocial.
Finalmente, la clausura de la jornada corrió a cargo de la secretaria de Relaciones institucionales de UGT PV Elvira Rodenas; que puso el acento sobre la necesidad de incorporar la perspectiva de género a la prevención de riesgos laborales y de evitar la visión androcéntrica existente tanto en este como en otros ámbitos. Ródenas finalizó su intervención refiriéndose a la reciente sentencia del Tribunal Constitucional, que avala el despido objetivo para las bajas justificadas, donde las personas trabajadoras, especialmente las mujeres, se ven empujadas a no poder ausentarse justificadamente de su puesto de trabajo y a reincorporarse sin haber podido recuperar su salud, con el consiguiente riesgo para ellas y para el resto de la plantilla.