En actividades de minería, construcción, fundición, fabricación de cemento y elaboración de áridos; fabricación, manipulación y transformación de vidrio o cerámica, se produce la exposición laboral a polvo de sílice.
La inhalación del polvo de sílice puede producir enfermedades profesionales como silicosis o cáncer de pulmón.
La Silicosis se produce por la inhalación de ciertos polvos con determinados porcentajes de sílice que son asimilados por el tejido pulmonar provocando la anulación y muerte al cabo de un cierto tiempo de las células, siendo considerada desde el punto de vista médico como una enfermedad irreversible.
En el Real Decreto 257/2018, de 4 de mayo, se incluye como enfermedad profesional la exposición al polvo de sílice cristalino debida a agentes carcinógenos.
En esta ficha elaborada a través de notas técnicas y guías del INSST pretendemos ofrecer información a trabajadores y empresarios sobre estos riesgos y formas de prevenirlos en el puesto de trabajo.